En un intento de doblegar la voluntad de los docentes en las medidas de protesta y que vuelvan a las aulas la gobernadora María Eugenia Vidal premiará a los maestros que no se adhieran a ninguna de las medidas de fuerza y que según manifestó en conferencia de prensa » decidieron dar clases y priorizaron a los chicos» a pesar del paro.

Durante una conferencia de prensa ofrecida en la Casa de Gobierno provincial, acompañada por sus ministros de Economía, Hernán Lacunza; de Trabajo, Marcelo Villegas; y de Educación, Alejandro Finocchiaro; la gobernadora dijo que se pagará «un adelanto de paritarias equivalente a 1500 pesos hasta 3750 pesos, que será recibido por todos los docentes como un adelanto a cuenta del acuerdo que, espero, podamos alcanzar con los dirigentes gremiales».
Además, se abonará «un reconocimiento extraordinario y por única vez al presentismo de los docentes que este mes decidieron dar clases y priorizaron a los chicos», consistente en mil pesos.
Asimismo la primer mandataria provincial aseguro que «no hay vocación de dialogo, hay vocación de conflicto por parte de los docentes. Hace semanas que dejaron de dialogar y de hablar de salario docente. La vocación es por un conflicto que se extienda el mayor tiempo posible. Creo que ese conflicto tiene dos perjudicados: los chicos y sus familias, que se quedan si la posibilidad de ir a la escuela. Segundo, los docentes, que a diferencia del resto de los trabajadores estatales, desde enero no cobran aumento salarial porque no hay acuerdo paritario».
Vidal pidió «(poner) todas las cartas sobre la mesa. Nosotros decidimos que no nos importa pagar costos electorales si tenemos que pelear por una educación mejor en la Provincia».
«Algunos pueden pensar que los perjudicados somos el Presidente y yo. No es así: los perjudicados son los chicos y los docentes», prosiguió, y añadió que «sé que su reclamo es justo, pero también sé que nos toca administrar una provincia fundida».
Vidal aseveró que «no voy a especular, no soy candidata ni trabajo por futuras candidaturas. No me importa si pierdo una elección por esta discusión, no me importa mi futuro cargo público», y destacó que «cuando millones de bonaerenses votaron este cambio, votaron esta discusión».
Dijo que su gobierno se sentó a negociar «siempre con la vocación de llegar a un acuerdo» y que «otros demostraron que sólo quieren el conflicto», por o que desafió a los sindicalistas a que «digan de qué partido son, a qué elección gremial o política quieren presentarse y cuáles son sus intereses y demos un debate abierto».



